jueves, 7 de junio de 2007

La Quebrada de Humahuaca

Declarada Patrimonio de la Humanidad en el 2003, el camino que va desde San Salvador de Jujuy hacia el norte es un contínuo regalo de paisajes y culturas, encantadores pueblitos y mucho sol y viento.
En la ruta soy tentado por un "ciclista choppero" para que cambie mi querida burra por una especie de sofa con ruedas; la verdad es que el invento es cómodo y parece eficiente pero de momento me quedo con la mía que ya me ha acompañado más de 7.000 km y claro, se le coge cariño!


Bueno acá se le llama Quebrada a lo que en la península se conoce como cañón, o en palabras simples y llanas un encajonamiento creado por un río. Y aquí de esto andan sobrados, he recorrido la Quebrada de las Flechas, la de las Conchas, la del Toro y ahora ando por la más famosa ( quizás no la más bella) de Humahuaca, todas se caracterizan por sus duras subidas o bajadas ( en serio?, seguir el cauce de un río no es nunca plano??) y por los espectaculares colores de las paredes que las circundan. La palma en eso se lo lleva el Cerro de los Sie7e Colores, en Purmamarca una de las villas más visitadas y que a pesar de sus encantos naturales está infestada por el terrible virus del turismo de autobús: comidas carísimas, niños que no van a la escuela para pedir a los guiris, meaderos de pago, mujeres que te persiguen con artesanías etc. etc.


Aún así una vez uno se aleja del centro se pueden apreciar los Pucarás, nombre que se da a las ciudadelas pre-hispánicas, de la época en que la Quebrada formaba parte del camino del Inca y único recuerdo de esa época. Estas ciudadelas están siempre colgada de una montaña y rodeadas de innumerables cactus gigantes lo que les da un aura especial.

Siguiendo por esta ruta ingresaré de nuevo en la Puna, el Altiplano, otra vez sobre los 4.600 metros de altura, a cruzar los andes por segunda ocasión esta vez buscando el desierto de Atacama, el más seco del mundo. De él dicen que tiene puntos dónde no ha caído una gota de lluvia en los últimos 200 años y eso junto a su altura lo convierte en el mejor lugar para observar los cielos nocturnos, no hay astrólogo que se precie que no curre por allá.

Para eso falta todavía mucho, debo antes subir montañas y visitar otros pueblos desolados que me impedirán, durante un buen periodo de tiempo, dar notícias de este viaje sobre ruedas.

Y mientras vosotros pasáis las calurosas noches del incipiente verano a la fresca con una cervezita en la mano ( al menos eso hacía yo) a un menda le toca encerrarse a las 8 de la tarde en el saco, antes que el hielo se apodere de mi. Disfrutarlo pues!

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Muy bien chaval, eres bastante mi ídolo.
Tardo en comentártelo, porque hace tiempo que Iván Funky -como así lo conozco- me habló que publicabas por aquí tus hazañas suramericanas.
Eso no quita que tu bmw z3 esté siendo desvirgado fin de semana sí fin de semana también por mí.

Con una sonrisa de satisfacción, te mando un saludo! ;-)

Aldo

El canguro también es un animal dijo...

Hola Jaime: como siempre, un placer leer tus crónicas de viaje. Espero con expectación tu foto en el Salar de Uyuni. Supongo que irás a visitarlo. Todavía me acuerdo de cuando veíamos las fotos en el trabajo. ¡Pensar que ahora estás ahí cerca!

Encontré la nota que te hicieron en el Diari de Girona. Para el que la quiera leer, el link es este: http://www.diaridegirona.cat/secciones/noticia.jsp?pNumEjemplar=2697&pIdSeccion=3&pIdNoticia=201009

Saludos

Lucio

CARMINA dijo...

Hermano barbudo.
Decirte que a veces me emociono cuando veo que hay gente que ni conoces que te esta escribiendo para darte animos, o algunos amigos como Lucio que siempre te recuerda que aqui tienes un monton de gente que te quiere.Cada dia te hecho mas de menos pero tambien estoy mas contenta por ver como estas cumpliendo tu sueno.
Un abrazo enorme

Jaime dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.